Punta Cana no es solamente el destino turístico más importante de la República Dominicana, es también la zona fuera del Gran Santo Domingo donde se levantan más proyectos inmobiliarios residenciales porque, dada la importancia de ese enclave de la región Este, dominicanos y extranjeros quieren tener una inversión como segunda vivienda, o para alquilarla en el esquema de rentas cortas, afirmó Alberto Bogaert, presidente de la Asociación de Empresas y Agentes Inmobiliarios (AEI).

“El desarrollo de Punta Cana es sorprendente, ya no solo es playa y arena, ahora son viviendas familiares que se venden como inversión, alejadas de la playa, pero con ciertas amenidades como piscinas, gimnasios, y la gente, en el afán de tener un segundo hogar o una inversión, ha asimilado ese mercado”.

Bogaert atribuye ese exponencial crecimiento a que Punta Cana es el destino que más turistas recibe en todo el año.

Las cifras lo demuestran: hasta septiembre de este año, según los datos del Banco Central, por el Aeropuerto Internacional de Punta Cana ingresaron 3,136,502 visitantes, de los cuales 3,019,018 son extranjeros.

En cuanto a la nacionalidad de los compradores, Bogaert expresó que los extranjeros tienen la supremacía, porque hay propiedades cuyos precios están por encima del poder adquisitivo del dominicano promedio. Las ofertas más atractivas para los extranjeros son las que se sitúan cerca de la playa, explicó el experto inmobiliario.

“Un apartamento cerca de la playa en Punta Cana o Cap Cana puede costar 400,000 dólares, pero se trata de algo super luxury, pero lejos de la playa encuentras propiedades de 90,000 hasta 70,000 dólares; los precios varían dependiendo del tamaño”.

Bogaert explicó que quienes tienen poder adquisitivo para comprar los apartamentos de lujo en la playa son básicamente los canadienses, españoles y norteamericanos.

“Pero cuando te vas alejando un poquito de la playa ahí entran los locales, que quieren también su propiedad en la zona, pero más retirados de la playa por tener presupuestos más bajos”.

En ese sentido dijo que hay muchos proyectos residenciales cuyos principales adquirientes son dominicanos ausentes, “ese es el principal mercado, tanto en Punta Cana como en otras localidades del país”.

Las ofertas, tanto en inmuebles ya construidos como proyectos en planos, abundan en plataformas digitales especializadas en bienes raíces.

Plataformas digitales

En el mundo inmobiliario, en el esquema de rentas cortas, hay una empresa que tiene los ojos puestos en la República Dominicana, debido al impacto que tiene en el sector turístico y los beneficios directos e indirectos que genera en las comunidades: se trata de la plataforma Airbnb.

Bogaert ofreció la información al destacar que, el mes pasado, la entidad que representa recibió a ejecutivos de esa compañía internacional, quienes realizaron un estudio en el país sobre el impacto económico de esa plataforma.

“La verdad es que la semana pasada nos visitaron ejecutivos de esa plataforma en Washington, y presentaron un estudio de impacto económico en República Dominicana. Los datos preliminares señalan lo que la plataforma genera en las comunidades, no entre los propietarios, sino lo que consumen los visitantes desde transporte hasta bares, restaurantes, y excursiones.

“Según ese dato, cerca 800 millones de dólares se generan en el país al año por consumo vinculado a Airbnb”, refirió al señalar que esa plataforma no le quita mercado a los hoteles.

Condohoteles

Alberto Bogaert explicó que el sector inmobiliario se mantiene en ebullición y cambios, y en ese sentido destacó que se están construyendo apartamentos solo para rentas cortas. “Hay una creciente oferta de edificios que se están haciendo para alquilar por renta corta, que se llaman condohoteles, son cientos de proyectos que se están haciendo a nivel nacional para captar a ese mercado”.